07 febrero 2006

¡Cuidado con ese futuro!

Obra de Achille Superbi

¡Cuídate, España, de tu propia España!* El principio de que hay que buscar lo que se oculta detrás de lo que se dice con excesivo énfasis ha adquirido carta de naturaleza en la afirmación que han hecho los voceros del PP acerca de la “OPA” de Gas Natural a Endesa, de lo que dicen que cuando ellos manden (¿?) desharán las decisiones empresariales y políticas que la pueden hacer posible en este momento, y ello, no viene sino a aclarar que quien manda en Endesa es Caja Madrid, es decir, el PP a través de los gobiernos de la Comunidad y el Ayuntamiento, por lo que algunos especialistas en estos temas han venido a decir que en el fondo lo que se está tratando de encubrir, además de no perder una cuota nada despreciable de poder, no es más que la financiación oculta que se le estaría haciendo a este partido. Bueno, ello ya sería suficiente para entender la beligerancia de la que hacen gala sus líderes. Lo que no es entendible es que lo hagan tras los pronunciamientos de las instituciones políticas y jurídicas de la Unión Europea en contra de las pretensiones del PP; actitud de éste que no hace más que sumar un nuevo desatino a los tantos con los que nos tienen perplejos.

¡Cuídate de las víctimas a pesar suyo, / del verdugo a pesar suyo /y del indiferente a pesar suyo!* Desatino en cuanto se pretendería ir no solo contra una operación económica avalada dentro de la lógica del sistema por los economistas e instituciones más solventes, sino que se pretendería ir contra la esencia misma del sistema, según el cual el pez grande se come al chico o, dicho de otro modo, que el mercado es el máximo regulador de la vida económica y su sancionador último, pretendiendo con dicha amenaza alcanzar la antítesis de tal principio con la intervención desde las instituciones políticas para deshacer lo que la economía habría sancionado. Bueno, vienen a recordarnos que no es nada nuevo ello en su hacer, que ya lo han hecho en otros momentos mediante los mecanismos de “venta” de las empresas del Estado y el nombramiento de sus amigos como directivos y controladores del montaje, además de beneficiarios crematísticos del tinglado resultante. Claro, en esto está la clave de la tal posición: la posibilidad de perder una parte sustancial del control del entramado financiero y económico del país si son otros los que gestionan tales asuntos.

¡Cuídate del leal ciento por ciento!* En otro aspecto, es de risa contemplar la gesticulación de Rajoy vociferando que si el país estaba tan bien, por qué el gobierno lo está moviendo con el debate autonómico, con la adopción de leyes de amparo y desarrollo de derechos civiles constitucionales y con políticas diferentes en los temas económicos. Y puede que algo esté cambiando si nos atenemos a aquello de que si ladran es porque algo les duele, aunque no creo que le sea muy grave a la derecha la situación, sobre todo en lo referente a la pela, pues al final siguen siendo la misma camada aunque se cambien de piel o de rótulo en la puerta de la oficina. Lo que sí está claro es que entre los intereses del consejero de banco o directivo de gran empresa y los del trabajador que los sostiene hay una distancia sideral que no se corresponde con ningún criterio de justicia social que debiéramos defender. Y es eso lo que estos pájaros defienden, la discriminación, el clasismo, la injusta diferencia.

¿Cuídate de los que te aman!* Bueno, y en estos días, otra noticia, aquella de que el PP se ha puesto de campaña electoral, no, mejor dicho, ya lo estaba. Lo que han hecho es oficializarla con lo que llaman recogida de firmas para convocar un referéndum contra la reforma del Estatuto de Cataluña. En cuanto a lo de estar en campaña electoral, nada que decir, cada uno lo hace cuando considera. Pero saben que el motivo que dicen perseguir con la tal recogida es anticonstitucional, lo que poco les importa porque en el fondo, además del hecho gravísimo de promover una actividad anticonstitucional, lo que pretenden en un primer término es contarse a sí mismos. En segundo, tener un espantajo con el que diariamente aparecer a la contra en los medios y, finalmente, provocar y alimentar un conflicto de representación sabiendo que ha de llegar el momento en el que la tal pretensión de referéndum sea llevada ante las Cortes. Que estas, en orden a sus obligaciones constitucionales, digan que no es posible celebrarlo para y por lo que aducen los que lo promueven.

¡Cuídate de tus héroes!* Y en ese momento estará servido el conflicto, pues la inmediata demanda será pretender que tengan más legitimidad esas firmas que el derecho y cauces constitucionalmente establecidos, incluso que el Parlamento y el resultado de las elecciones, por lo que, según los firmistas y en ese momento, deberá ser de ejecutiva obligación la convocatoria de elecciones con el nada oculto objetivo del desalojo del gobierno existente y de los partidos y diputados que no han apoyado las exigencias del PP; la no celebración de ese imposible y antidemocrático referéndum y la disolución inmediata de las Cortes se convertirán en la farsa a la que asistiremos desde discursos muy dolientes de los voceros del PP intentándose representantes de la pretendida realidad política mayoritaria y de “loables demandas democráticas de cambio”.

¡Cuídate del futuro!...* Así, y desde lo que es en el fondo una activa política antidemocrática, lo que se pretende con las firmas es enrocar al sistema constitucional y hacer aparecer a los verdaderos demócratas como antidemócratas. Ese es el trasfondo de la actitud de la derecha al atizar el españolismo y el fermento y caldo de cultivo de las dos Españas, y ya lo sabemos, eso es demasiado peligroso. Por ello, que sepa bien lo que hace el que da su firma para ese bodrio antidemocrático de las firmas. Lo que está alimentando. Lo que está ayudando a poner en marcha y algunas de las consecuencias para la convivencia que de tal acto se pueden derivar.
* César Vallejo. Poema XIV de España, aparta de mí ese cáliz